Cristina Fernández volvió a hablar y esta vez para tratar de defenderse en el caso de vialidad, donde la apuntan como la jefa de una asociación ilícita de lavado de dinero. Nuevamente la vicepresidente cargó contra los fiscales que piden a los jueces que la condenen con 12 años de prisión e inhabilitación perpetua para cargo político.

“Voy a solicitar que se extraiga testimonio de cada una de las mentiras de los fiscales contrastadas con los testigos, las pericias, la documentación con la prueba obrante en el expediente y con el derecho”, disparó.

Además, sin ninguna prueba,  vinculó el intento de magnicidio con el juicio y las causas judiciales que afronta. “Desde el ámbito judicial se da licencia asocial para que alguien pueda hacer cualquiera. Esto es crear un clima que han construido, no con las tres toneladas de prueba, lo que han son 30 toneladas de tapas de Clarín, de La Nación y de alguna otra revista semanal donde se va estigmatizado a una mujer. Me siento en estado de indefensión con este país y con este poder judicial”, expresó.