No debe perderse de vista que los estudiantes tienen derecho a recibir Educación Sexual Integral (ESI) siendo respetados en sus creencias y preservados en sus identidades. La Jornada que se propone para el próximo viernes 6 de octubre, incluye la adopción "a priori" de una ideología particular para el abordaje de ESI, que atenta de manera desvergonzada, incluso con frases escritas con insultos, contra el ideario de las familias en general. Aunque suene ilógico, las minorías que defienden la igualdad de género se han introducido de tal modo en el sistema educativo, que violentan con improcedencias a las familias que piensan y sienten diferente. Paradójicamente, defienden la "tolerancia" y la "inclusión" desde el extremo de la intolerancia, acusando de retrógrados a quienes defienden la familia tradicional basados en su fe en Dios.
En la actualidad, presenciamos la aplicación de un modelo educativo que se contradice a sí mismo ya que, en su discurso, expresa que se deben escuchar todas las voces y con sus hechos niegan la eficacia de ello. Las propuestas del sistema educativo en lo que respecta a ESI, se plantean como exclusiva "bajada de línea ideológica específica".
Debemos aunar voces que alienten al respecto por el derecho de los niños y adolescentes a recibir una educación que colabore con su fromación y no la denigre o adultere, una formación libre de prejuicios y mediocridades conceptuales que antentan contra la construcción de la identidad en el proceso de formación de los sujetos.
La educación parte de los hogares y el espacio escolar no debe atentar en ninguna de sus dimensiones el ideario de los mismos. La escuela es un espacio de fortalecimiento, enriquecimiento y colaboración en la formación integral del niño.
Por otra parte, la definición de conceptos siempre está basada en la puesta en acción de las facultades humanas; esto quiere decir que no se puede presionar a una persona, menos aún a menores, a definir conceptos que en la afectividad, volición y espiritualidad atenten contra su identidad.
Una vez más, el lobo disfrazado de la abuela de Caperucita, se presenta ofreciendo un dulce con pretensiones de engaño. Hasta se sancionan leyes para poder sostener y dar marco legal a una infinidad de ilegalidades. Ilegalidades, que lejos de buscar el bien común, consiguen separar y enfrentar a los seres humanos.
por: Lorena Leiva (Prof. en Ciencias de la Educación.)