En un episodio de violencia armada que sacudió a Rosario, un subinspector de policía perdió la vida de manera trágica este martes por la noche. El subinspector Leoncio Bermúdez fue asesinado de un disparo en la cabeza mientras investigaba disturbios en el ingreso a la guardia del Hospital Provincial.

El incidente ocurrió minutos antes de las 22, en la calle Zeballos al 400, justo frente a una garita policial fija. Dos hombres, con barbijos, ingresaron al hospital con aparentes intenciones de localizar a un hombre bajo custodia del Servicio Penitenciario. En un episodio de violencia armada que sacudió al barrio Martín en Rosario, un subinspector de policía perdió la vida de manera trágica este martes por la noche. El subinspector Leoncio Bermúdez fue asesinado de un disparo en la cabeza mientras investigaba disturbios en el ingreso a la guardia del Hospital Provincial.

El incidente ocurrió minutos antes de las 22, en la calle Zeballos al 400, justo frente a una garita policial fija. Dos hombres, enmascarados con barbijos, ingresaron al hospital con aparentes intenciones de localizar a un hombre bajo custodia del Servicio Penitenciario. Según las primeras informaciones, su objetivo era perpetrar un asesinato.

Al parecer, los sicarios preguntaron por el baño, pero en realidad se dirigieron a una sala donde se encontraba el individuo bajo vigilancia. La situación desencadenó un enfrentamiento con el personal de seguridad del hospital, resultando en un violento forcejeo y múltiples disparos.

En cuestión de segundos, uno de los atacantes se cruzó con el subinspector Bermúdez, disparándole mortalmente en la cabeza antes de emprender la fuga. Aunque no está claro si lograron alcanzar a su objetivo original, el trágico desenlace se tradujo en la pérdida de la vida del valiente oficial.

El subinspector fue trasladado de inmediato al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), pero lamentablemente, minutos después, se confirmó su fallecimiento. Asimismo, una enfermera de aproximadamente 50 años resultó herida de bala en ambas piernas durante el altercado y recibía atención médica en el lugar.

El caso está siendo investigado por la fiscal Gisela Paolicelli, quien busca esclarecer los motivos detrás de este violento ataque y llevar a los responsables ante la justicia. Tanto dentro como fuera del Hospital Provincial, quedaron numerosas evidencias balísticas en forma de vainas servidas, marcando la magnitud del enfrentamiento.

Este trágico suceso ha conmocionado a la comunidad de Rosario y ha puesto de manifiesto la necesidad de abordar de manera urgente la creciente violencia armada en la región, así como garantizar la seguridad tanto de los profesionales de la salud como de los agentes encargados de proteger a la sociedad.c

Al parecer, los sicarios preguntaron por el baño, pero en realidad se dirigieron a una sala donde se encontraba el individuo bajo vigilancia. La situación desencadenó un enfrentamiento con el personal de seguridad del hospital, resultando en un forcejeo y múltiples disparos.

En cuestión de segundos, uno de los atacantes se cruzó con el subinspector Bermúdez, disparándole mortalmente en la cabeza antes de emprender la fuga. Aunque no está claro si lograron alcanzar a su objetivo original, el trágico desenlace se tradujo en la pérdida de la vida del oficial.

El subinspector fue trasladado de inmediato al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), pero lamentablemente, minutos después, se confirmó su fallecimiento. Asimismo, una enfermera de aproximadamente 50 años resultó herida de bala en ambas piernas durante el altercado y recibía atención médica en el lugar.

El caso está siendo investigado por la fiscal Gisela Paolicelli, quien busca esclarecer los motivos detrás de este violento ataque y llevar a los responsables ante la justicia. Tanto dentro como fuera del Hospital Provincial, quedaron numerosas evidencias balísticas en forma de vainas servidas, marcando la magnitud del enfrentamiento.