Este lunes, el Centro de Asistencia Judicial informó que los resultados de ADN confirmaron que los restos humanos hallados en Ricardone el pasado 11 de julio pertenecen a Andrea Portillo, quien había desaparecido el 25 de marzo de este año. La mujer, oriunda  de la ciudad de Santa Fe, fue vista por última vez en una estación de servicios de la A012 en San Lorenzo.

La desaparición de Portillo, de 45 años, generó una intensa búsqueda y preocupación en su entorno familiar, que perdió contacto con ella cerca de las 23 horas del 25 de marzo, momento en el cual su teléfono dejó de estar operativo. Días después de su desaparición, sus familiares se manifestaron frente a los Tribunales de Santa Fe exigiendo avances en la investigación.

Inicialmente, la causa estuvo bajo la jurisdicción del fiscal santafesino Matías Broggi, pero al determinarse que los hechos ocurrieron fuera de su jurisdicción, el caso fue transferido a la Fiscalía de San Lorenzo. En el transcurso de la investigación, el 11 de julio, se hallaron restos humanos en las inmediaciones de la Ruta A012 y el Camino a la Cremería, en la localidad de Ricardone, lo que reavivó la esperanza de hallar pistas sobre el paradero de Portillo.

A partir de ese momento, el Ministerio Público de la Acusación y el Gobierno de la Provincia ofrecieron una recompensa de 10 millones de pesos a quienes pudieran aportar información relevante. Finalmente, este 9 de septiembre, se confirmó la trágica noticia: los restos encontrados eran efectivamente de Andrea Portillo. Una de sus hijas ya había reconocido algunas de las pertenencias de su madre en el lugar del hallazgo.