En un operativo conjunto que significó un duro golpe al narcotráfico, Gendarmería Nacional detuvo a Brian Bilbao, uno de los prófugos más buscados de Santa Fe y cabecilla de una organización dedicada al tráfico transnacional de cocaína. El arresto se concretó durante la madrugada del martes en una zona rural de Exaltación de la Cruz, provincia de Buenos Aires, cuando intentaba escapar a bordo de una camioneta y una avioneta utilizadas en el transporte de droga.

La captura fue resultado de una investigación de largo alcance iniciada tras el aterrizaje de una aeronave con cargamento de cocaína en Pergamino. Durante el procedimiento, uno de los ocupantes intentó identificarse sin documentación, pero al ser verificado, resultó ser Brian Bilbao, de 47 años, quien permanecía prófugo desde hacía más de dos años. El gobierno de Santa Fe había ofrecido una recompensa de 50 millones de pesos por datos que permitieran dar con su paradero.

La investigación reveló que Bilbao y su hermano Waldo operaban desde el country Campo Timbó, en Timbúes, un barrio privado del Cordón Industrial santafesino que servía como base logística para vuelos clandestinos procedentes de Bolivia y Paraguay. Desde allí se coordinaban operaciones en las que avionetas “bombardeaban” campos bonaerenses con cargamentos de cocaína, que luego eran recogidos y distribuidos en distintos puntos del país.

El arresto de Bilbao marca el desmantelamiento de una red criminal de alto nivel, caracterizada por su estructura sofisticada y conexiones internacionales. Su hermano Waldo había sido detenido en Rosario tiempo atrás, pero Brian, considerado el cerebro operativo, había logrado mantenerse oculto hasta esta semana.

Con la detención de su líder, las autoridades consideran desarticulada la organización, aunque las investigaciones continúan bajo la órbita de la Justicia Federal, ante la posibilidad de nuevas detenciones vinculadas a la red.