El suceso ocurrió en Quilmes, Buenos Aires, en donde vecinos denuncian que una familia tiene a su perra de raza rottweiler atada frente a la vivienda en la vereda. Más allá de la agresividad que represente este animal, se encuentra en un estado de abandono debido a que casi no recibe agua y comida. Un vecino declara que el animal siempre se encuentra con hambre, trata de llevarle comida, pero solo come restos y no le dan alimento balanceado.

La casa está ubicada en la calle Larrea al 1400, donde se puede ver al can atado a la pared junto a una cucha y una montaña de escombros que impiden la circulación por la vereda. Los vecinos aseguran que lo utilizan como un medio para que nadie se atreva a acercarse a la vivienda.

Los habitantes de  la zona temen por la seguridad de los chicos que van al colegio o juegan en el barrio y pasan por allí. Además, los vecinos exclamaron no solo representaría un peligro para los chicos que pasen por allí, sino también para los otros animales que transcurren en la calle.

Fuente: Crónica