Durante el gobierno de Alberto Fernández, la Universidad Madres de Plaza de Mayo (UNMa) recibió más de 1.500 millones de pesos del Estado, una cifra equivalente a unos dos millones de dólares. A pesar de esta importante inversión, los resultados académicos de la institución fueron notablemente bajos: en un período de cuatro años, solo 16 estudiantes lograron graduarse, lo que representa apenas el 0,62% de la matrícula total de 2.564 alumnos.


La Universidad Madres de Plaza de Mayo, que hasta septiembre de 2023 operaba como el Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos Madres de Plaza de Mayo, fue creada por la fallecida Hebe de Bonafini. En ese mismo mes, la institución fue transformada en una Universidad Nacional, un proceso que según la Justicia, se realizó de manera irregular. Tres meses antes de esta transformación, la universidad eligió a Cristina Caamaño Iglesias Paiz como rectora, un nombramiento que ha sido cuestionado por la actual administración.


Con la llegada al poder de La Libertad Avanza, el Ministerio de Capital Humano, encabezado por Sandra Pettovello, cuestionó la legalidad de la creación de la universidad y otras cuatro instituciones similares, y detuvo el financiamiento estatal a la UNMa. Además, se designó a Eduardo Maurizzio como Rector Organizador y se inició una auditoría para evaluar la calidad académica y el funcionamiento de la universidad.


Entre 2020 y 2023, la Universidad Madres de Plaza de Mayo recibió un total de 1.587 millones de pesos, con un notable incremento en 2023, año electoral, cuando se le asignaron más de mil millones de pesos.